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Conocemos que la sinceridad es muy valiosa desde el punto de vista espiritual. En nuestra sociedad es difícil ser realmente sincero, conlleva no pocas complicaciones, aunque resulta indispensable para recorrer el camino de Xiu Lian.
La parresía (παρρησία), el hablar franco en aras a la verdad, sin seducción ni demagogia, manteniendo la opinión diferente de lo que cree la mayoría, acarrea, a menudo, elevados perjuicios para quien la practica, a quien habitualmente se desprecia por no tener “sentido común” cuando no se le odia o es objeto de la envidia que recae sobre quién dispone de la libertad de espíritu necesaria para ser realmente sincero. De modo que el parresiastés es alguien que tiene las cualidades morales que se requieren, primero, para conocer la verdad y, segundo, para comunicar tal verdad a los otros.
Tal sinceridad implica la obligación de hablar con franqueza para el bien común, cultivandola con coraje, descartando la falsedad o el silencio, asumiendo la responsabilidad social en lugar de acomodarse en la apatía moral, aceptando el riesgo o la critica en lugar de la seguridad o la adulación.
El Pais publicó un articulo de Ignacio Sotelo sobre el tema:
ResponderEliminar".....Justamente, la falta de parresia explica que a la mayoría de los economistas, y con ellos a sus fieles seguidores los políticos, les haya pasado inadvertido durante casi cinco años algo tan obvio como las consecuencias financieras de la burbuja inmobiliaria. ¿Cómo se explica, por lo demás, que la inmensa mayoría de los economistas no hayan previsto la crisis?
Atreverse a manifestar algo que se salga del marco de los intereses dominantes lleva consigo de inmediato una descualificación que nos condena a la invisibilidad, con un alto coste en prestigio y otras gabelas que pagaríamos de buen agrado, si ello no implicase perder la plataforma pública desde la que poder alzar la voz.
Un ejemplo contundente. Se han escrito montañas de papel sobre la durísima crisis que nos aflige, sin que apenas haya saltado a la palestra el nombre de Marx, el primero que describe las crisis económicas, vinculándolas al modo de producción capitalista....."
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ResponderEliminarLa verdad triunfa por sí misma, la mentira necesita siempre complicidad.
ResponderEliminarEpicteto de Frigia (50-135) Filósofo grecolatino.